Hacete socio para acceder a este contenido

Para continuar, hacete socio de Caras y Caretas. Si ya formas parte de la comunidad, inicia sesión.

ASOCIARME
Columnas | campaña electoral | mundo | silencio

Ausencia global

La campaña electoral y el resto del mundo: un silencio ensordecedor

El mundo faltó sin aviso a la campaña electoral, una ausencia injustificada que poco tiene que ver ni con la tradición y sensibilidad política y cultural de los partidos (muy especialmente de la izquierda).

Suscribite

Caras y Caretas Diario

En tu email todos los días

Mucho se ha dicho y escrito sobre la pobreza de contenidos y programas de la campaña electoral. No es el caso del Frente Amplio que hace casi un año el Congreso Tabaré Vazquez aprobó las Bases Programáticas 2025-2030. En cambio, sí es el caso de la coalición poli cromática que postula su reelección donde a pesar de los esfuerzos del líder del mini Partido “Dependiente” (del lacallismo) sus socios se niegan a discutir, antes del 27 de octubre, su programa y compromisos de gobierno.

Al contrario muy poco se ha dicho y escrito de la ausencia total de los temas internacionales en el debate electoral más allá de vagas y licuadas referencias al “contexto internacional”, y siempre como un insumo a tener en cuenta al momento de hacer las previsiones sobre sus efectos en nuestra economía. Esto lamentablemente vale también para el Frente Amplio donde, a pesar del muy buen y fundamentado capítulo 7 capítulo dedicado a esos temas en el programa de gobierno, ninguna de las 48 propuestas presentadas por Orsi en el multitudinario acto de Colonia (todas y cada una de ellas absolutamente justas e impostergables) hace mención a la situación internacional.

El mundo faltó sin aviso a la campaña electoral, una ausencia injustificada que poco tiene que ver ni con la tradición y sensibilidad política y cultural de los partidos (muy especialmente de la izquierda) y que nada tiene que ver con el momento actual donde asistimos a un cambio época caracterizado por la emergencia extraordinaria de China, los intentos de Estados Unidos por contrarrestarla y sus consecuentes amenazas hacen que la paz mundial viva su peor momento desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial.

Ese desinterés por el resto del mundo es aún más inexplicable ante la gravedad del la coyuntura y que fuera nítidamente reflejada en cuatro acontecimientos que acontecieron la semana pasada y en menos de 48 horas.

11 de octubre

“Realmente me preocupa que en los próximos tres meses y medio o cuatro terminemos en una guerra mundial por la gente que tenemos [en el poder]”. "Estamos muy cerca de la Tercera Guerra Mundial. Muy muy cerca”. Así se expresaba Donald Trump ante miles de simpatizantes que lo aplaudían en Coachella, California y prometía que en caso de de volver a ser presidente pondría fin a la guerra en Ucrania, el caos en Oriente Medio y evitaría definitivamente la Tercera Guerra Mundial.

Al neto de estridencias y proclamas electorales, el ex presidente tiene muchas posibilidades de volver al comando de la principal potencia militar del planeta.

10 de octubre

”la pregunta que cabe hacerse es: ¿cuál será el principal campo de batalla de la Tercera Guerra Mundial?”

Es la interrogante que plantea el ensayo "La Tercera Guerra Mundial y su polvorín asiático", escrito por el prestigioso experto en geopolítica, el profesor Zheng Yongnian y publicado la semana pasada en WeChat (el WhatsApp chino) y que en pocas horas fue leído y comentado por decenas de millones de usuarios.

La respuesta del académico tan simple como categórica: “Desde todas las perspectivas, será el ' Asia-Pacífico. La razón es simple. Esta parte del mundo tiene todos los elementos capaces de desencadenar una guerra mundial. Se pueden resumir en los siguientes: intereses económicos, una versión asiática de la OTAN, modernización militar y nacionalismo. convertirse en un importante iniciador de la guerra en Asia. La razón principal por la que Estados Unidos planea la guerra son los enormes beneficios económicos que puede obtener en Asia”.

En general, el "giro hacia Asia" de Barack Obama fue visto como una señal de que Estados Unidos estaba empezando a desviar su atención, sus prioridades temporales, sus recursos, hacia el área asiática para aumentar sus posibilidades de ganar la competencia decisiva de nuestro tiempo.El «pivote hacia Asia» iba dirigido a China. Sus orígenes se remontan mucho más atrás. El colapso de la Unión Soviética, el fin de la Guerra Fría después de medio siglo, significó la desaparición del enemigo tradicional. Desde entonces, Estados Unidos ha tratado de redefinir a su "enemigo", y ese es China.

Finalmente, concluye: "Desde la perspectiva de grandes cambios geopolíticos, Asia se enfrenta a un peligro de guerra sin precedentes. Ya sea por competencia política, guerra convencional o disuasión nuclear, la situación en Asia se está deteriorando rápidamente”.

China ha sido siempre muy prudente al momento de emitir juicios sobre la situación internacional.. Más bien evita declaraciones alarmistas, Y si bien este ensayo no es la posición orgánica del gobierno o del Partido Comunista, un análisis sobre los peligros de una Tercera Guerra Mundial de un experto muy escuchado por el mismo Xi Jinping tiene un significado político a tener muy en cuenta.

La “viralización” del documento de Zheng coincide, y no casualmente, con los dichos del presidente taiwanes durante el acto de celebración del Día Nacional, una fecha que recuerda el derrocamiento de la última dinastía imperial en 1911 y el establecimiento de la República de China (nombre oficial de Taiwán).

Segun Lai Ching-te, "la República Popular China no tiene derecho a representar a Taiwán" y que "no están subordinados entre sí” y subrayó su compromiso de salvaguardar la soberanía y el desarrollo de Taiwán frente a cualquier intento de anexión.

El “derecho a representar ” a Taiwan no es solo una reivindicación irrenunciable para la República Popular sino que, desde octubre de 1971, es reconocido por la Resolución 2758 de la Asamblea General de las Naciones Unidas , y lo son 183 países de los 193 estados miembros de la ONU que mantienen relaciones diplomáticas con el gigante asiático sobre la base del principio de una sola China.

Días antes el líder del Partido Progresista Democrático ya había afirmado que Taiwán era un “país soberano e independiente” y que resultaba “imposible” que la República Popular China fuese la “madre patria” de los taiwaneses.

48 horas después el Comando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación (EPL) envió sus tropas del ejército, la marina, la fuerza aérea y la fuerza de cohetes para realizar ejercicios militares conjuntos con el nombre en código Joint Sword-2024B en el estrecho de Formosa, la más imponente demostración de poderío militar que se recuerde.

Las ejercitaciones sirven como una severa advertencia a los actos separatistas de las fuerzas de la "Independencia de Taiwán". Es una operación legítima y necesaria para salvaguardar la soberanía estatal y la unidad nacional, dijo el capitán superior Li Xi, portavoz del Comando del Teatro Oriental del EPL.

Las maniobras militares son un fuerte elemento disuasorio contra las provocaciones de las fuerzas separatistas que buscan la "independencia de Taiwán" y representa una acción justa en defensa de la soberanía nacional y la integridad territorial, dijo Chen Binhua, portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado.

"Estamos dispuestos, con la mayor sinceridad y esfuerzo, a luchar por la reunificación pacífica. Sin embargo, no prometemos renunciar al uso de la fuerza y no dejaremos ni el más mínimo espacio para la independencia de Taiwán", se lee en un comunicado del Ministerio de Defensa que, según los analistas, echa por tierra la ilusión de las fuerzas separatistas de Taiwán de que, hagan lo que hagan, China continental se abstendrá de emprender acciones militares.

La “cuestión Taiwan” se ha convertido en el epicentro del enfrentamiento China- Estados Unidos que hoy atraviesa el momento más delicado desde que Trump iniciara su guerra anti China y una pesada hipoteca para la estabilidad y la paz del planeta.

10 de octubre

El mundo se encuentra al borde de una verdadera tercera guerra mundial”.

¿ Lo afirman Reagan, Brezhnev en la década de los 80, los peores momentos de la guerra fría?. No. Son palabras de Miguel Angel Moratinos, el alto representante de Naciones Unidas para la Alianza de Civilizaciones.

“Por primera vez en mi larga carrera estoy extremadamente preocupado y estamos al borde de una verdadera tercera guerra mundial”, ha dicho el exministro de Relaciones Exteriores de

España a raíz de “la concatenación” de hechos Medio Oriente , que le hacen prever una gran escalada del conflicto.

Según el diplomático - que fuera también representante de la Unión Europea para el proceso de paz árabe-israelí entre 1996 y 2003 - tras el ataque terrorista de Hamás a Israel del 7 de octubre de 2023, la respuesta del gobierno israelí liderado por Benjamín Netanyahu ha sido en base al “trauma y la humillación”.

Moratinos hizo un llamado a Estados Unidos y Europa a abrir relaciones con Rusia y China para acabar con el conflicto que según él pasa por el reconocimiento de dos estados y que, si no se produce, "no habrá estabilidad ni ninguna solución”.

11 de octubre

Un total de 105 países suscribieron una carta, a propuesta de Chile, respaldando al Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, ante la declaración de persona non grata por parte del Gobierno de Israel.

La misiva expresa que acciones de esta índole socavan la capacidad de las Naciones Unidas para llevar a cabo su mandato, que incluye la mediación en los conflictos y la prestación de apoyo humanitario. En Medio Oriente, esto podría retrasar aún más el fin de todas las hostilidades y el establecimiento de una vía creíble hacia la solución de dos Estados que vivan uno junto al otro en paz y seguridad.

El gobierno Uruguayo se negó a suscribir el documento, según la cancillería la decisión de Israel correspondía a un posicionamiento del secretario general que ese país consideró “desequilibrado” y que “no correspondía o no era necesario” inmiscuirse.

Tampoco se inmiscuyó en setiembre pasado cuando se abstuvo de votar una resolución, respaldada por una abrumadora mayoría de la Asamblea General de la ONU que exige a Israel “poner fin a su presencia ilegal en el territorio palestino ocupado”, un “hecho ilícito de carácter continuado que genera su responsabilidad internacional”, y que lo haga a más tardar en 12 meses. Ni LO HIZO en octubre del año pasado cuando tampoco votó la resolución resolución que exigía a Israel un alto al fuego inmediato e incondicional en Gaza y la entrega de ayuda humanitaria para proteger a la población civil.

Sin embargo se inmiscuye al momento de condenar (con justa razón) la masacre del 7 de octubre perpetrada por Hamas y que costo la vida de más de 1200 israelíes inocentes. Pero se desentiende de los más de 42.000 palestinos muertos (la mayoría mujeres, niños ancianos) por el ejercito israelí, ni se pronuncia sobre los crímenes de guerra y los actos genocidas del gobierno israelita denunciados por la comunidad internacional.

“No vemos las cosas como son, sino como somos” (Talmud). Así son Lacalle Pou y sus aliados de gobierno. Así no son los que creen que la paz mundial es un supremo valor universal y se esfuerzan por preservarla (FIN).

Dejá tu comentario

Forma parte de los que luchamos por la libertad de información.

Hacete socio de Caras y Caretas y ayudanos a seguir mostrando lo que nadie te muestra.

HACETE SOCIO