Aunque la FM local no los pase, La Folclórica quiere que usted vea y escuche su manso floreo

No piense que es ficción. No piense, tampoco, que es un denso y almidonado adoctrinamiento sobre las bondades de enfocar el oído en las raíces intangibles del terruño.

Todo indica que la invitación de esta orquestita es a escuchar música, este sábado (12 de octubre), en el Centro Cultural La Experimental (anote la dirección: Decroly 4971, en el barrio Malvín); las entradas están a la venta por Tickantel.

Y un paseíto manso, mientras espera que hierva el agua para el mate, por las rutas youtuberas le confirmará un dato decisivo para aceptar la invitación: La Folclórica rebosa musicalidad en interpretaciones corales e instrumentales de varios títulos de ese cancionero que usted llamaría folclore; y si le presta atención a la interpretación de “Escobita de arrayán” -¿se acuerda?, claro, la canción de Mario Carrero-, dígame después si no le asaltan las ganas de cantar con ellos aunque, por razones de salud pública, usted solo tenga permiso para cantar en la ducha.

Ahora le explico

Días atrás llegó un mensaje a la redacción de este medio. Después de algunos años sin estar en contacto directo, el compositor, intérprete, director de coros, Sebastián Larrosa, contó en ese mensaje que desde fines de marzo de 2023 estaba al frente de este proyecto, La Folclórica, y que este sábado volverán a presentarse en La Experimental.

Contó también que con este colectivo estaban buscaban “una sonoridad ‘desenchufada’ y abrazadora”, sin metros y metros de cables, ni otros equipamientos que midan en toneladas. Las voces ahí, los instrumentos ahí, al alcance del oído cercano, más un repertorio conocido, muy conocido, pero revisitado con arreglos bien interesantes.

Luego de contar estos detalles a modo de presentación, Larrosa envió una suerte de ¿manifiesto?, ¿de declaración de principios?, en un plan que se desmarcaba la aburrida grandilocuencia que suelen tener los comunicados de prensa. Y ahí viene la historia.

Ahora ellos se explayan

La Folclórica, dicen entonces ellos mismos, es un colectivo de “22 cantores y cantoras e instrumentistas que se lanzaron a buscar una sonoridad” despojada, “desenchufada” y abrazadora. La palabra ‘abrazadora’, por cierto, si que es una metáfora eficaz en este caso. Si prueba otra vez con el canal de YouTube de La Foclórica, seleccione el registro de “Canción de las cantinas”, de Manuel José Castilla y Rolando Valladares, interpretado en agosto de este año también en La Experimental. Si no se siente abrazado o abrazada, despeje prejuicios y otras zanahorias, e inténtelo de nuevo, por favor.

El plan musical es interpretar “refinados arreglos vocales e instrumentales escritos por su director, el músico uruguayo Sebastián Larrosa. Así, voces, percusión, acordeón, flautas y varias guitarras, se amalgaman para lograr una sonoridad fuera de lo común”, dice el colectivo. Es un juego, con mucha picardía retórica, pero si usted sigue escuchando con atención verá que tienen razón.

Escuche qué voces

El colectivo, se dijo ya, nació “a a fines de marzo del 2023, pero varios de sus integrantes hace muchos años ya que se pasean por la escena musical de nuestro país”. ¿No lo cree? Mire solo una parte de la lista: Gustavo “Pacho” Martínez (¿se acuerda de MonTRESvideo, que Pacho integró con Fernando Cabrera y Daniel Magnone?), Mayra Hugo (ya lo sabe, ¿no?, con Mariana Ingold y Estela Magnone integraron Travesía, primer grupo de mujeres de la música popular uruguaya); Ignacio “Nacho” Alonso (uno de los fundadores y letristas de Murga La Mojigata, percusionista de Numa Moraes, El Alemán y Bien Losdó, además de llevar adelante su proyecto Espacio Reducido); el director, Sebastián Larrosa (director de orquesta, músico y arreglador, que además de tener trayectoria propia, con discos editados como solista ycomo integrante de varias bandas, ha acompañado en piano o teclados a artistas de la talla de Laura Canoura o Pepe Guerra, entre otros).

¿Y que pasa con el resto? Aquí ellos mismos lo confiesan: “El resto de los integrantes son todos re buena gente. Bueno, casi todos”.

Una que sepamos todos, che

El manifiesto o texto confesional de La Folclórica termina con unos párrafos sin desperdicio.

Dice la barra: “Aunque parezca difícil de creer, La Folclórica se dedica a la interpretación de música de raíz folclórica. Y ojo, les da por la prosa poética”.

Entonces se vuelven a despachar: “Nacimos con la convicción del rumbo a recorrer: abrazar el folclore de nuestro país y de nuestra vecina de río, Doña Argentina. La propuesta busca amalgamar voces e instrumentos para lograr una sonoridad de raíz, ramas y hojas, con aromas de tierra, agua y viento fresco”.

Y siguen (palabras, está claro, les sobran): “Nos gusta decir que nuestro repertorio navega libre, tierra adentro, entre las dos orillas del Río Uruguay y que, con él, vamos pescando canciones en las profundidades de la desmemoria. Pero, además de bucear en autores icónicos, buscamos el equilibrio del repertorio, versionando a compositores nuevos, o incluso autores que no necesariamente se identifican como folcloristas.”

Aquí, en el remate, se dan “el bombo”: “La calibrada selección de las canciones interpretadas se hamaca al compás de zambas, cuecas, chamarritas, litoraleñas, gatos, chayas, rasguido doble, vidalas, milongas o bailecitos, con el fuerte impulso de los arreglos exclusivamente creados para La Folclórica por su director, Sebastián Larrosa”.