En su discurso, el reconocido actor, productor y director defendió la industria argentina, se pronunció en contra de las matanzas en Gaza, saludó a “los héroes del cine” y recordó a figuras como Pino Solanas, Hugo del Carril, Eva Perón, Norma Pla y Nora Cortiñas. “Tendríamos que estar junto a todas las luchas”, sugirió y cerró: “Saludo a la comida que falta y mi consejo es este: las inversiones vendrán de la rebeldía o seremos nada”.
La Universidad presente
Otro de los momentos más álgidos tuvo lugar luego de que los guionistas de la película “Puan”, María Alché y Benjamín Naishtat, obtuviera el Martín Fierro al mejor guion. Uno de los que recibió el premio fue el decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, Ricardo Manetti.
“Nuestras universidades se encuentran en una situación crítica debido al ajuste presupuestario y al desfinanciamiento que está llevando a cabo este Gobierno”, dijo y denunció los “ataques” a profesores y estudiantes.
Advirtió que “quienes tienen la responsabilidad de las políticas públicas están queriendo hacer desaparecer la universidad pública” y a viva voz exigió que “no perder la autonomía universitaria”.
Vacas sagradas
Mirtha Legrand se sumó a la reivindicación de la industria del cine:“Por favor, no cierren el INCAA”, pidió no bien arrancó su discurso. “El cine argentino es el más importante de habla hispana así que lo tenemos que mantener”, recalcó.
La primera actriz Graciela Borges también dejó lo suyo. “Mi pedido especial es que no nos digan cómo tenemos que hacer cine. Sabemos hacer cine”, afirmó en alusión a los criterios comerciales y de recaudación con el que varios funcionarios de Gobierno determinaron la necesidad o no de financiar producciones nacionales.