Esta declaración, de alto voltaje discriminatorio, la hizo Audiard hace cinco meses en una entrevista que concedió al medio Konbini. Pero ahora, con toda la movida que estalló tras su estreno en México, la andanada de nominaciones a los Oscar, volvieron a tomar estado público.
Estas ideas refuerzan lo que se ve en la película, en la que se trata de forma banal cómo un varón hétero cis blanco imagina la experiencia de transicionar y cómo ese mismo varón imagina que es un país lationamericano y se presenta la identidad mexicana solo en función de la violencia narco y la marginalidad.
“Con lo que sabía ya era suficiente”
Durante la presentación de la película, Audiard había comentado que no investigó demasiado sobre México antes del rodaje: “Con lo que sabía, ya era suficiente”, admitió. En una clara muestra de desinterés o menosprecio, que le valió una serie de críticas.
Sin embargo, ahora, el repudio fue mas allá, cuando se conocieron sus declaraciones, en la que describe al idioma español como un "lenguaje de países modestos, de países en desarrollo, de pobres y migrantes".
De hecho, su nombre se convirtió en tendencia en las redes sociales, donde muchos usuarios en redes expresaron su descontento y consideraron que los comentarios del francés tenían una carga clasista y despectiva hacia los países hispanohablantes.
“Nadie quiere a los franceses”
Mensajes como "El francés es un idioma de invasores" o "Por eso nadie quiere a los franceses", se multiplicaron rápidamente, reflejando el malestar generalizado por los comentarios de Audiard.
Asimismo, hubo otros internautas que señalaron la hipocresía de la postura del director, considerando el pasado colonialista de Francia y su propio papel como extranjero retratando una historia mexicana sin conocimiento profundo del país.
“El país más pobre de América y con problemas de migración es Haití y no es casualidad que se hable francés”, escribió un usuario en respuesta a la declaración de Audiard. Otro agregó: “Curioso diga eso cuando Francia está llena de inmigrantes musulmanes y africanos”, evidenciando las contradicciones en su argumento. En esa misma línea, un tercero sumó: “El francés es un idioma de genocidas y esclavistas que aún tienen bajo su yugo a países africanos”.
Hubo quienes se animaron a ir más allá y sugirieron que Audiard debería ser declarado persona non-grata en los países hispanohablantes.
Para muchos, las palabras del director son una prueba más del desprecio con el que ha tratado a la cultura mexicana y latinoamericana en “Emilia Pérez”, y que su visión sobre el país y su gente está llena de estereotipos y condescendencia.