Miles de cubanos se movilizaron este viernes en la Marcha del Pueblo Combatiente para condenar la política hostil de Estados Unidos hacia la isla y exigir el fin del bloqueo económico, así como la eliminación de Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo. La marcha fue convocada por el Gobierno cubano, tuvo lugar en la Tribuna Antimperialista José Martí, La Habana.
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El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, calificó de "falsa e inmoral" la acusación de que su país patrocina el terrorismo.
"Es doblemente inmoral cuando proviene de un país donde se entrenan grupos paramilitares que financian actos terroristas contra estructuras sociales y económicas en Cuba", denunció. Además, Díaz-Canel recordó que figuras como Luis Posada Carriles y Orlando Bosch, implicados en el atentado contra un avión de Cubana de Aviación en 1976, vivieron en Estados Unidos sin ser procesados.
El mandatario también destacó que el propio secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, ha admitido que no hay justificaciones para mantener a Cuba en la lista de patrocinadores del terrorismo. "El bloqueo y esta lista son opciones despiadadas hacia el pueblo cubano que deben cesar ya", exigió. Díaz-Canel denunció que estas medidas impiden transacciones financieras y el comercio internacional, privando a Cuba de alimentos, medicinas y bienes esenciales.
En su discurso, el presidente rechazó las críticas que intentaron boicotear la marcha calificándola de antiestadounidense. "Hacia el pueblo estadounidense no expresamos odio ni animadversión. Al contrario, extendemos la mano para fortalecer lazos de hermandad", afirmó.
La marcha, liderada también por el general de Ejército Raúl Castro Ruz, reunió a miles de cubanos que corearon consignas como "Tumba el bloqueo" y "No somos terroristas, sácame de la lista". Los manifestantes recorrieron las calles de La Habana para exigir respeto a la soberanía de Cuba y denunciar el impacto humanitario y económico del bloqueo.
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