El centro de detención de Guantánamo se inauguró en 2002 para albergar a los reclusos de la "guerra contra el terror" que impulsó Estados Unidos tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
En 2009, el entonces presidente Barack Obama (2009-2017) firmó una orden ejecutiva para cerrar la prisión, emplazada en un territorio reclamado por Cuba, pero el Congreso se negó a financiar su clausura.
Trump, durante su primer mandato (2017-2021), suspendió esa orden ejecutiva, aunque no se trasladaron nuevos presos a Guantánamo.
La administración de Joe Biden se había comprometido a cerrar la prisión, pero no lo hizo.
Cuba rechaza
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció como un "acto de brutalidad" el anuncio del Gobierno de EEUU de que empleará la base naval de Guantánamo como centro de detención para los migrantes que expulse de su país la administración que preside Donald Trump.
"En acto de brutalidad, nuevo gobierno de EEUU anuncia encarcelamiento en base naval en Guantánamo, ubicada en territorio de Cuba ilegalmente ocupado, de miles de migrantes que expulsa forzosamente, a los que ubicará junto a las conocidas cárceles de tortura y detención ilegal", escribió el miércoles en la red social X.
EEUU ocupa ese territorio de 117 kilómetros cuadrados desde hace 121 años, en contra de la voluntad del pueblo cubano y como rezago colonial de la ilegítima ocupación militar del país, iniciada en 1898 tras la intervención de EEUU en la guerra de independencia contra el colonialismo español.
(Sputnik)