Adrián Simancas, un joven venezolano de 23 años, vivió una experiencia que califica como "desconcertante" el fin de semana pasado mientras realizaba una travesía de trekking y packrafting junto a su padre en las gélidas aguas del estrecho de Magallanes, al sur de Chile. Durante la expedición, Adrián fue sorprendido por una ballena jorobada que lo "tragó" y luego lo expulsó, un hecho que quedó registrado en video y se viralizó en redes sociales.
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"Yo pensé que era una ola", relató Adrián al medio chileno La Prensa Austral, describiendo el momento previo al impacto. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que se trataba de algo mucho más grande: "Cuando siento ese impacto tan fuerte, supe que no podía ser una ola, porque sería un tsunami o algo raro".
El joven, quien lleva siete años viviendo en Punta Arenas, contó que, al darse vuelta, vio algo "entre azul y blanco" que lo rodeaba y lo hundía.
"Pensé que me había comido algo, porque habíamos conversado poco antes que por esa zona también podrían haber orcas, y esas sí son más agresivas. En esos tres segundos que estuve bajo el agua, pensé que podría haber muerto", confesó.
A pesar del miedo inicial, Adrián logró mantener la calma gracias a su experiencia en navegación y a los cursos de técnicas de rescate que ha realizado. "Uno queda aturdido por la temperatura del agua al momento de sumergirse, la mente queda como paralizada", explicó. Afortunadamente, el chaleco salvavidas que llevaba lo impulsó hacia la superficie, permitiéndole salir a flote. "Ahí salí muy desorientado", recordó.