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Sociedad Caserío de los Negros | José López Mazz | racismo estructural

Reparación y reivindicación

Otra mirada al hallazgo en el Caserío de los Negros: "Uruguay sigue siendo bastante racista"

El arqueólogo José López Mazz reflexionó sobre la falta de reconocimiento del rol de la comunidad afrodescendiente en la historia de Uruguay y sostuvo que, a pesar del supuesto progresismo uruguayo, el racismo sigue profundamente arraigado en la sociedad.

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El reciente hallazgo de restos humanos en el Caserío de los Negros en Montevideo, un sitio histórico y simbólico para la comunidad afrodescendiente, reaviva el debate sobre la memoria y la reparación histórica en Uruguay. El arqueólogo José López Mazz, uno de los líderes de las excavaciones en el Caserío, compartió en una entrevista con Caras y Caretas los pormenores del descubrimiento, reflexionó sobre el racismo estructural en el país y resaltó que “Uruguay sigue siendo bastante racista”.

Según López Mazz, el Caserío de los Negros fue identificado como uno de los principales centros de confinamiento y tráfico de personas esclavizadas en el Río de la Plata, operado por la Compañía de Filipinas entre 1787 y 1812. Desde 2009, el arqueólogo y su equipo realizaron investigaciones que confirmaron la ubicación del caserío y su muralla perimetral, la cual se ha preservado y restaurado en el Parque Capurro.

En años recientes, el proyecto recibió el apoyo de la Comisión Nacional de Sitios de Memoria, y los arqueólogos pudieron excavar en el terreno de una vecina que permitió el acceso a su propiedad. En este sitio, hace aproximadamente dos semanas, se descubrió una fosa con los restos de un adolescente. “El esqueleto se encontró bajo un nivel de destrucción del Caserío, lo que indica que es anterior a la demolición de la estructura”, explicó López Mazz y explicó que el tipo de enterramiento, sin objetos asociados, coincide con los patrones observados en contextos de esclavitud.

El racismo estructural y la invisibilización de la historia afrodescendiente

El arqueólogo aprovechó la conversación para expresar su preocupación sobre la invisibilización de la historia afrodescendiente en Uruguay. Según él, las narrativas históricas oficiales no reconocen el papel central de los afrodescendientes y los pueblos indígenas en la construcción del país. “Es un problema de nuestra identidad nacional, que creen todos que bajaron de los barcos”, señaló López Mazz, en referencia a la noción de que Uruguay es predominantemente de ascendencia europea, mientras ignora el rol de comunidades que han sido históricamente marginadas.

López criticó el racismo persistente en el país, que considera sigue presente en todos los ámbitos, incluidos los sectores progresistas. "Los progresistas son tan racistas como los que no son progresistas", afirmó y destacó cómo las instituciones uruguayas, a pesar de adoptar posturas progresistas en ciertos temas, suelen relegar o minimizar la historia afrodescendiente e indígena. En este sentido aclaró que no es el caso de la Intendencia de Montevideo que pone una gran relevancia en estos temas y es consecuente en su accionar.

El también antropólogo reflexionó sobre el significado de este hallazgo en términos de memoria y reparación para la comunidad afrodescendiente. Los estudios que se realicen sobre los restos, que incluyen análisis de ADN y otros estudios biológicos, confirmarán la procedencia del individuo y brindarán más detalles sobre las condiciones en las que vivía la población esclavizada en el Caserío. Además, señaló la importancia de recuperar otros elementos del sitio, como el muelle donde desembarcaban las personas esclavizadas y otros espacios del Caserío.

“La arqueología tiene el potencial de ayudar a reparar y reivindicar esta comunidad que ha sido invisibilizada”, expresó y resaltó la importancia de que estos proyectos cuenten con el apoyo y financiamiento adecuados para lograr una investigación profunda. Para López Mazz, la restauración de la memoria histórica honra a quienes sufrieron y resistieron la esclavitud y contribuye a una sociedad uruguaya más inclusiva.

Las excavaciones en el Caserío de los Negros continuarán en busca de otros vestigios que nos hablen sobre las vidas y la resistencia de las personas esclavizadas en Uruguay. López Mazz y su equipo de estudiantes y especialistas en derechos humanos mantienen el compromiso de investigar y dignificar esta parte fundamental de la historia uruguaya, aún no contada en su totalidad.

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